lunes, 10 de marzo de 2008

La muerte

Salgo desde las entrañas de la tierra para amarte.
Y me levanto entre los cadáveres de mis ancestros
Y te llego envuelta en la mortaja infatigable
de la ausencia

del afecto.

Pero no hay dolor.

Mi cuerpo viejo y deshojado huele a tierra mojada.

No espanta.

Las aves se detienen encima para adornar la muerte
Y su vuelo revive el alma.
Y camino, con pasos lentos y gigantes hasta ti
Y tu esperas por mí
Y no me despido
No me despido nunca

¡No digo adiós… sería la muerte!


Hindu Anderi
Escrito el 13 de septiembre de 2007.

No hay comentarios: